Tener que oír "TONTÁS" (como dice la Fé) todos los días es duro y descorazonador.
Oigas a quien oigas de la cúpula del PP o sus asociados periodistas, es siempre el Apocalipsis que nos llegará si la "extrema izquierda" consigue gobernarnos.
A mí me gustaría saber qué más puede pasar a l@s muchas personas que están en la pobreza desde que gobierna nuestro querido benefactor PP.
Hechos: Nos han mentido, nos han robado, han prevaricado, han malversado, han acabado con todos los privilegios obtenidos en las luchas sociales de los últimos años, han sumido al país en la incultura, el paro, la pobreza..., crean leyes que nos amordazan y castigan si se publican verdades... ¡Qué más se puede tolerar en un país democrático!
¿Cómo puede ocurrir que nos tomen por idiotas de continuo, amenazando con el caos si no les dejamos seguir gobernando a ell@s? ¡Cuánta soberbia y prepotencia muestran algun@s!
Yo conozco a mucha gente que ha votado a Podemos: jubilad@s, amas de casa, estudiantes, religios@s, buenos profesionales..., gente normal, eso sí ¡harta hasta lo indecible! Gente que ama la justicia y quiere un cambio social y más igualdad. ¿Es eso pecado? Porque yo siempre he crecido que el pecado era lo otro: La soberbia, la avaricia, la lujuria, la gula, la ira...
No tengáis tanto miedo a que huyan los capitales si entran en el poder los nuevos partidos, porque ya habían huido hacia los paraísos fiscales con vosotros y vuestros amiguetes.
No tengáis miedo a que no sepan gobernar, porque para que ocurra lo de aeropuertos sin aviones, autopistas sin coches, grandes edificios infrautilizados, trabajadores en la pobreza, tant@s parad@s de larga duración, rescate a los bancos, niñ@s mal alimentados, desahucios..., lo sabe hacer cualquiera.
Cuando pasó lo de Bankia y el Santander cogió a Rato como asesor, les escribí una reclamación diciéndoles que no lo entendía, porque para asesorar como él, que llevó a la ruina a tant@s lo hacia yo gratis, por lo que les era más rentable, pero no resultó, y ... luego se ha visto que yo tenía razón.
Así que estad tranquilos, bajad la tensión, que no pasa nada malo que no haya pasado antes y os lo vuelvo a decir: "Yo no soy de extrema izquierda, ni chavista, ni bolivariana, ni de ETA, ni...", solo soy una jubilada, eso sí, HARTA, HARTA. Os pasa como a Inda, que por mucho que se os repitan las cosas no os enteráis y ya resultáis cansinos.
Lo mejor de los nuevos partidos ya se está viendo: más diálogo, necesidad de pactos, lucha contra la corrupción, deseo de igualdad y más justicia, personas más lúcidas tendiendo puentes... ¡Ojalá sirva para que tod@s tomemos más conciencia de lo que es bueno para la mayoría y no para unos pocos y sus amiguetes!
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