HONORABILIDAD

"Dignarse" en vez de quejarse o indignarse debiera de ser el afán de seres que quieren un mundo más justo y por ende más humano.

"Dignarse" es llenarse de dignidad, poniendo a trabajar los talentos que cada uno de nosotros posee.

Demasiadas veces, para perjuicio de toda la humanidad, dejamos de crecer en lo profundo para crecer en lo superficial.

Más dinero, más poder, más superficialidad, más disfrute momentáneo...., lo cambiamos por menos honorabilidad y así vamos admitiendo y aceptando cualquier cosa por denigrante que resulte.

Damos títulos de honorable, no al que tiene Honor, sino al que tiene poder aunque machaque al pueblo, le mienta, le robe... Una honorabilidad de superficie, de escaparate, para engordar el ego, no HONOR del alma que es donde reside la verdadera dignidad.

¡ Cuántas  personas deberían poseer este título !. Personas que sufrieron y apoyaron a los necesitados, lucharon por las libertades de los hombres, dieron su tiempo y sus saberes al beneficio de sus congéneres, fueron seres que se "dignaron" a ellos mismos haciendo crecer su sensibilidad, sus talentos y sus habilidades con esfuerzo continuado durante toda su existencia.

En este mundo que nos ha tocado vivir en el que cada uno de nosotros ponemos nuestro granito de arena, a veces haciendo y otras veces dejando hacer, hay demasiados " honorables " que se blindan desde el poder y se aforan para poder beneficiarse de sus amigos poderosos cuando se descubren sus fechorías, y muy pocos "Honorables" reconocidos de los que abundan entre los de a pie, los silenciados, los silenciosos, los humanos.

¡ Ojalá un día desaparezcan las prevendas y todos tratemos de dignarnos para conseguir un mundo más justo y humano, donde todos los talentos que se nos dan se puedan cultivar al máximo en beneficio de todos!.